Nacer en agua dulce, migrar al mar...volver nadando contra corriente esquivando garras de osos al lugar donde nació para procrear... Y todo, para acabar en un horno, pobre criatura.
INGREDIENTES:
- Dos lomos de salmón limpios de piel y espinas.
- Dos patatas medianas.
- Una yema de huevo.
- Leche (medio vaso)
- Dos cucharadas de mantequilla.
- Dos cucharadas de vino blanco.
- Eneldo.
- Sal y pimienta.
TIEMPO: 20-25 min. + 30-40 min de la cocción de las patatas.
PREPARACIÓN:
Lava las patatas y ponlas a cocer sin pelar. Cuando estén hechas, mételas en agua fría y quítales la piel. Cháfalas con un tenedor y ponlas en una olla a fuego medio. Añade sal, pimienta y la mantequilla y remueve.
Cuando se haya derretido la mantequilla, agrega la leche y la yema de huevo y mezcla hasta que quede bien integrado. El puré tiene que quedar espeso. Retíralo del fuego y deja que se temple.
Echa un poco de aceite de oliva en una bandeja de horno y pon los lomos de salmón. Riégalos con el vino blanco, échales un poco de sal, pimienta y eneldo y mételos al horno a 180ºC.
Pon el puré de patata en una manga pastelera, o en una bolsa y corta el extremo.
Cuando el salmón esté casi hecho, sácalo del horno y dispón por encima el puré. Vuelve a meterlo y gratina. Sirve bien caliente.
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